28 noviembre 2008

Hola, cómo estamos

Éso decía Barragán para presentarse. Pues habría que decirle al Sr. Barragán que estamos mal, muy mal. Ahora que ya podemos decir que pasamos por una crisis brutal sin que nos llamen antipatriotas y que para solucionarla el Presidente zETApé regala, sí regala, a la banca 150.000 millones de €uros y 11.000 millones a los ayuntamientos -que ya veremos cómo se los trincan- es hora también de ir avisando al personal de en qué país vivimos. Sí, porque en el país donde algunos jueces pasan de investigar, en supuestos tiempos de tregua, chivatazos a la ETA y se dedican a pedir certificados de fallecimiento de Franco para... Darse notoriedad y, eso sí, quedar en ridículo al declararlo hoy la Audiencia Nacional incompetente -así que desde hoy, Garzón el incompetente- pues, hay que ir avisando al personal de en qué país vivimos porque, si lo anterior es serio, más serio me parece lo de Bombay.

Resulta ahora que los giliprogres la llaman Mumbai y que todos, si no queremos parecer paletos, debemos llamarla así. Progresías que se imponen hasta terminar con la realidad y lo tradicional e imponer la sociedad Matrix en la que no vienes de La Coruña, ni siquiera de Coruña. No, debes venir de A Coruña aunque nunca nadie, jamás, la llamara así, por poner un ejemplo. De la misma manera que a la juez se le llama jueza hasta que se impone el término de tal forma que la R.A.E. de la Lengua lo admite. Pronto llegará lo de miembras pero entonces espero que llegue lo de futbilisto, periodisto y policío. Es que hay que ser imbécil.

Pero a lo que iba, que me pierdo, lo de Bombay manda cojones. Se preguntarán por qué digo hoy tal cosa, pues porque, sin entrar en lo que suponen para la seguridad internacional los atentados de la India -ya tocará-, me parece demencial que el Gobierno de España, en medio de una crisis terrorista que ha sido denominada por el país atacado como acciones de guerra y con los antecedentes existentes, se dedique a diferenciar entre ciudadanos de primera, segunda y otros, a los españoles atrapados en aquel infierno. Demencial y vergonzoso.

Es entendible que la Presidenta de la Comunidad de Madrid saliera de allí como alma que lleva el Diablo, lo contrario hubiera sido una irresponsabilidad absoluta. Fuera el que fuera el signo político de unos dirigentes electos por nuestra soberanía, deberían, imperiosamente, ser evacuados de allí ipso facto. Ahora bien, sería igualmente entendible que, todos los españoles allí acorralados fueran, de forma igualitaria, haber sido evacuados. Y no ha sido así.

Ayer, durante toda la madrugada, estuve escuchando en directo cómo más de una quincena de compatriotas mostraban en diversos medios de comunicación su disgusto absoluto al enterarse en el último instante que se quedaban en tierra. Resulta que no sé qué listo más listo de España decidió mandar a Bombay un avioncito de 60 plazas cuando los servicios diplomáticos españoles y el Ministerio de Exteriores sabían que el número de españoles allí atrapados era mucho mayor. Lo peor ha sido que estos pobres compatriotas, ciudadanos de segunda, han sido abandonados a la suerte de Sarkozy sin otra información del consulado que "viene un avión francés pero no sé cuándo ni con quién debéis hablar" vino a decir el Cónsul ya que ha sido Nicolás, al parecer, quien ha proporcionado para nuestros conciudadanos plazas libres en un avión francés.

Vergonzoso. Demencial. Ignominioso. Asqueroso. Bananero. Pero sobretodo injusto. Si se puede decir, muy injusto. Injustísimo. Así que ya lo sabéis, españolitos de a pie, cuidadín si os encontrarais en una de esas que, ya veis, para zETApé algunos son más iguales que otros ¿Imaginan ustedes tal situación si el PP gobernara? Es que imagino los titulares de PRISA&Cia. y... Ay, cómo estamos.

1 comentario:

Republica Rojigualda dijo...

Pero hombre, ¿no te acuerdas que fue Sarkozy quien rescató a las azafatas atrapadas en Chad el año pasado? Lo extraño hubiera sido que ZP hubiese hecho otra cosa.