Uno por uno es uno

La otra noche vinieron a cenar a casa mis padres y mi hermano, al final de la cena salió el tema de la educación en este país, aunque como decía Aznar, no se dice este país se dice España. Mi brodel defendía el sistema, el profesorado, los temarios, la pedagogía y defendía que el fallo residía en el modelo social o en su crisis. En el pasotismo aparente de los progenitores, en la falta de interés en la educación de sus niños, pero no como causa sino como consecuencia de la dejadez general existente en la sociedad española.

Puede tener razón en eso, aquí, en España, da igual todo. Antonio Burgos escribió hace unos meses en el ABC un artículo buenísimo, lo tituló No passssa nada, merece la pena leerlo ya lo publicaré aquí. Y es que parece que lo que prima es el carpe diem, pero ojo, el carpe diem sin responsabilidad. Vivir el momento pero de ocio y de diversión, de diversión en la ignorancia, en la incertidumbre, en el no saber, en el da igual. Y ese es el problema, que da igual. Y es una pena, porque yo no he sido nunca un buen estudiante pero, coño, el nivel según miras atrás cada vez es menor. Por muy zoquetes que fuéramos sabíamos que el Teide es el pico más alto de España y el Mulhacén de la Península, además de saber escribirlo; que Góngora y Quevedo no podían ni verse y que, al menos, existe algo llamado logaritmo neperiano.

En la conversación mantuve una línea dura, no puede ser de otra manera, contra el sistema educativo español que me parece una mierda y, sin ser técnico en el tema, me permito opinar hasta donde llego, es decir, sí he sido parte del mismo. Afortunadamente no conocí ni la LOGSE ni la ESO, sólo con el nombrecito está dicho todo, pero creo que el número de profesionales críticos con el actual sistema educativo es amplísimo, tanto en Primaria como en Secundaria y en la Universidad. Y mira por donde, a las cuatro de la madrugada de una guardia en el teléfono, en una tranquila y aburrida noche, cae en mis manos un Semanal que trata el tema. Jejeje y yo pensando en escribir algo sobre esto.

Pues resulta que hay un señor por ahí, D. Ricardo Moreno Castillo profesor de matemáticas, que colgó en la red un compendio de lo que considera las falacias del actual sistema educativo. Lo tituló: Panfleto antipedagógico, ha sido un éxito y ahora lo ha publicado la editorial Leqtor. Algunas de sus frases:

• Un profesor que para motivar a los alumnos convierta el estudio en un juego está, sencillamente, engañándolos.
• La única igualdad legítima es la igualdad de oportunidades. Que unos las aprovechan y otros no ya es otra cosa.
• El profesor que no ejerce como tal no deja a los alumnos más libres, al contrario, los deja bajo la tiranía de los matones de la clase.
• No se puede aprender a dividir si primero no se memorizó la tabla de multiplicar, ni manejar un diccionario si no se sabe el orden alfabético.

Algunos datos y cifras:

• Uno de cada cuatro estudiantes no logra acabar la ESO(equivalente al Graduado Escolar).
• El 37% de los jóvenes de Extremadura, Baleares y Castilla-La Mancha sale al mercado laboral sin otro título que la ESO.
• El 73,3% de los alumnos admite que falta al respeto al profesor(+ d 11.000 estudiantes de secundaria).
• El 23% de los alumnos españoles de 15 años no alcanzan el nivel MÍNIMO, de lengua y matemáticas.

Además en el artículo aparecen unos cuantos profesores contando sus experiencias, algunas de sus frases:

• ¿Se puede saber por qué los políticos hacen las leyes de educación escuchando a los pedagogos y a los sindicatos, pero ignoran a los profesores que estamos cada día en el aula?
• He tenido alumnos que han llegado a 4º de ESO con más de 30 asignaturas pendientes.
• En mi clase hay 27 niños de 22 nacionalidades.
• Estamos creando una sociedad de burros.

Pero en este país,

-¡que no se dice este país que se dice España!,

eso, pero en España no passssa nada, como dice D. Antonio.