Hace bien poco escribí sobre cinco magníficos que decretaron que en España, los señores con dinero y poder, como "los Albertos", no tengan que entrar en la cárcel cuando han sido condenados a ello. Bueno pues trankis, colegas, que hay pa'más. Ahora se condena a los chorizos de GESCARTERA, Camacho & Cia. ¿Y? Pues nada, que robar más de 14.000 millones de pesetas (traduzcan ustedes a €uros que me pierdo) pues lleva la durísima pena de 11 añitos de cárcel, en el peor de los casos que ha sido el de Camacho. Porque a otros los han condenado a infernales penas de siete o, incluso, la demoledora pena de TRES añazos -3- de cárcel.
Bien, echemos cuentas ahora de lo que en la práctica cumplirán los condenados gracias a la magnífica legislación española, con verdaderas joyas sociales como el Código Penal de Belloch, entonces Bi-Ministro y ahora Alcalde de Zaragoza. El mismo que en la oposición como concejal no podía vivir en la capital aragonesa porque decía que los pisos eran muy caros por culpa del PP, hay que echarle cojones. Pues digo que el amigo Camacho cuando cumpla un tercio de su condena podrá obtener el tercer grado, es decir, ir a dormir a la cárcel y no pisarla ni por el día, ni en fin de semana y a mitad de condena...A la puta calle. La presidenta de GESCARTERA, Pilar Giménez Reyna, con tres años y seis meses de prisión y, encarcelada ya preventivamente en 2001, ¿cuánto tiempo va a estar en prisión? Ah, me ha parecido oír en la tele que Farruquito ya está en la calle...
Pero la traca final, la mascletá de las incongruencias jurídico-legales de los últimos tiempos es el "caso Mari Luz". Digo incongruencias jurídico-legales porque este caso demuestra, una vez más, que las leyes españolas son una puta mierda y que el sistema judicial es vergonzoso. Cuenta todas las mañanas Federico Juménez Losantos-pincha que te escojonarás- que Dña. Esperanza Aguirre dice que matar en España sale muy barato. Y tienen razón. Yo diría más. Matar, violar, traficar, estafar, agredir, insultar, vamos delinquir. Es gratis total.
La ley penal en España está hecha para el que la incumple. Eso pienso y mi experiencia no tiene duda alguna de ello. El delincuente se ve abrazado por un sistema garantista nacido de los complejos postfranquistas de la Transición y lleno de psicología y pedagogía para el delincuente, que se la podían meter por el culo ciertos "profesionales", más preocupados por el pobrecico delincuente que por sus víctimas. A la víctima, que le den. Es el sistema quien protege al delincuente. Sus derechos, posibilidades, opciones, son múltiples y respetadas al máximo, hasta límites esperpénticos. Este caso es un claro ejemplo.
Resulta que el hijo de puta en cuestión se paseaba por España con toda tranquilidad mientras el Sr. Juez Rafael Tirado Márquez, juez titular del Juzgado número 1 de lo Penal de Sevilla, se rascaba los huevos en la capital hispalense sin importarle una mierda si el cabrón ése, violador y abusador, asesino, estaba en la cárcel o en la puta calle. <<Bah, estará reisertándose>>, pensaría su Señoría. Porque ese es el fin de la ley española protectora del criminal y no de la víctima, que el delincuente se reinserte en la sociedad y no que la sociedad se proteja de los hijos de puta que a diario matan, roban, estafan o trafican. Dice ahora este juez que no se siente responsable y cree muy grave que «se asocie de forma diabólica el retraso con la muerte de la niña». Por eso firmaste su orden de ingreso en prisión el día que viste la noticia por la tele ¿no? O sea, ayer. Claro, será fallo del funcionario de turno o el policía o el vecino de la víctima ¿no? Pero es que no es la primera vez. Desde ayer este tipo lleva escolta policial y este es su careto,
No te diré cabronazo, no. No te lo llamaré, pero...
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